Y se llaman poetas tan ufanos
y escriben versos que entre sí coordinan.
No son poetas quienes se imaginan,
por plasmar un verso, artistas mundanos.
Hay poesía en los hechos cotidianos.
Poemas naturales que culminan
y sin usar el verbo se iluminan
aunque no haya orador ni pluma en manos.
Ebria de rocío muestra su color
la tímida flor que, al llegar la hora,
atrae al insecto embrujado de olor.
El sol en su zenit expande calor
otorgando vida a quien aquí mora.
Poesía que late con todo el valor.
No se llaman poetas tan ufanos
por escribir versos que entre sí coordinan.
Llámense poetas a quienes subliman
que Gaía posee talentos humanos.
Belén R.