Sed bienvenidos a este pequeño pueblo literario pensado para compartir el amor por las letras y, sin ningún tipo de pretensión, hacer de él un canal abierto de comunicación entre personas con gustos afines, en el que poder intercambiar esas inquietudes que nos llevan a escribir. ¡Gracias por llegar hasta aquí!

MIS AMIGOS

viernes, 29 de noviembre de 2013

ALGÚN DÍA (DEL POEMARIO FORJADORAS DE PALABRAS)



Como homenaje a mis compañeras de letras y coautoras del poemario Forjadoras de palabras, voy a traer a mi casa, poco a poco un poema de cada una de ellas.
Quiero compartir con vosotros, la increíble calidad de los versos de estas desconocidas poetas y sé que vais a quedar encantados cuando conozcáis sus trabajos.

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Hoy voy a presentaros a Rosa María García Gómez, una poeta dulce y clara tanto en sus versos como en su alma.


ALGÚN DÍA




Algún día
envolveremos el planeta
con un beso de colores,
como aquel atardecer
que, al marcharse,
nos abrazó en soledad.




Algún día
los niños crecerán
libres como los árboles.




Algún día
uniremos nuestras manos
y construiremos hospitales,
no bombarderos,
viviendas,
no portaaviones,
un arado,
no un fusil,
una escuela,
no una bomba,
un parque,
no una cárcel.



Algún día
tú y yo caminaremos
por senderos
que nadie ha transitado.

Algún día...

Rosa María García

lunes, 25 de noviembre de 2013

¡YA BASTA!



No puedo escribir poesía,
los dedos 
se me agarrotan
cuando se siega
 otra vida,
cuando otra mujer
 solloza.




Alzad vuestra voz 
bien alta,
que el clamor llegue 
hasta el cielo,
para gritar que 
¡ya basta!,
para abandonar el miedo.




Que se entere todo
 el mundo:
quien comparte
 vuestra vidahoy
 es un ser nauseabundo
que se alimenta
 de heridas.




No les protejáis 
callando
porque se escudan en ello
y seguirán
 golpeando
y cometiendo atropellos.


 

Que no diga que
 es humano
quien utiliza
 la fuerza
de la boca, armas 
o manos
para haceros 
prisioneras.



Sumo mi voz 
a la vuestra
condenando a los 
cobardes que a una mujer 
defenestran
aunque una fue su madre.





Belén R.

viernes, 15 de noviembre de 2013

LOS ÁRBOLES MUTAN


Los árboles mutan
al compás de la vida.




En apariencia estoicos,
rocas sembradas,
el viento dirige sus ojos,
las estaciones 
cambian el color
de sus pupilas.




En primavera, reflejan
el tono de la hierba.
En su interior custodian
la sangre nueva
que irriga
sus artríticos brazos.




En verano, inventan
colores para los nidos,
aromas de bayas,
nanas de aire 
que mecen sueños
aún por comenzar.




En otoño, lloran su desnudez.
El rubor cubre sus mejillas
y claudican ante el lecho
de húmedos ocres
iridiscentes.




En invierno, maquillan su frente
con rocío
que les acoraza
de las lágrimas gélidas
que desparraman 
las nubes.


Los árboles mutan
al compás de la vida.




Belén R.

viernes, 8 de noviembre de 2013

MI CASA



Mi casa no está hecha
de paredes y techos,
de puertas y ventanas,
de plantas apresadas
en macetas de barro...




Mi casa es una montaña
de sólido cuerpo
y cálido corazón.
Descanso en sus grutas
a la caída de la tarde
y asomada a sus grietas
recibo al sol cada mañana.




Mi casa es un bosque verde
que tiñe de esperanza mis pupilas,
sembrada de vida
acompasa sus latidos a los míos,
erguida y distante
siente el tórrido calor
y la helada escarcha.




Mi casa es un lago
que remansa los avatares.
Su orilla neutraliza
la marejada que la rodea
y si el desánimo se aposenta 
en su lecho,
provoca oleaje hasta ahogar 
al intruso.

Mi casa está viva.




Belén R.